Felicidad: Nueve letras que en conjunto significan tanto

Felicidad: Nueve letras que en conjunto significan tanto
Ser feliz podría compararse con una mariposa: si la persigues volará lejos, pero si no, ella sola se posará sobre ti. Y es que la felicidad no se busca, ella sale a tu encuentro todos los días, tampoco se define en un solo momento o en un solo lugar, ni siquiera con una sola persona y cuando verdaderamente llega, no es efímera.

La felicidad no es como la pintan, con expectativas e idealizaciones fantasiosas, cuando eres feliz te sientes pleno, amado, lo sientes, lo transmites. Para ello, es importante que reflexiones:

a) ¿De qué estás hecho y cuál es la fuente de tu fortaleza?
b) ¿Qué te motiva?
c) ¿Te valoras por lo que tienes o por lo que has logrado?

Cuando te sientas débil y te digas a ti mismo que no vale la pena continuar, echa un vistazo adentro de tu corazón, cierra los ojos y entenderás que está de más preocuparse por las cosas sobre las que no tienes control. Entonces, si no tienes el control, ¿tiene sentido que te preocupes? El verdadero triunfo se encuentra incluso en medio de las derrotas y el fracaso, ¡levántate!

Uno de los peores errores que puedes cometer en la vida, es quedarte esperando a que todo pase o se dé como por arte de magia; tú ve y construye caminos donde no los haya. Si vas a rendirte, piensa en el motivo por el cual comenzaste y no retrocedas ni siquiera para tomar impulso. La vida y la felicidad no se tratan de dejar pasar la tormenta sino de aprender a bailar bajo la lluvia.

Lo mejor para construir una autoestima saludable es el té: quiérete, perdónate, ámate, sonríete, regálate, consiéntete, edúcate, cuídate, supérate y valórate. Hacen falta malos días para apreciar los buenos, no te enfoques en todas las puertas que se han cerrado, tal vez no has notado aquella ventana abierta.

Para hacer de la felicidad un hábito, te invito a poner en práctica lo siguiente:

1. Tienes la opción de elegir de quién te rodeas, a quién escuchas y a quién no, por lo tanto, decide bien y recorre siempre el buen camino.

2. Sonríe, aunque no tengas muchas ganas. Existen miles de millones de personas en este mundo, no dejes que una sola o unas cuantas apaguen esa luz que tu sonrisa transmite.

3. Sueña y atrévete a fallar. El coraje no es tener la fortaleza para seguir adelante, es seguir adelante cuando no tienes fortaleza, porque todo es posible para aquel que confía y cree.

4. Jamás te menosprecies. La belleza que atrae, rara vez coincide con la belleza que enamora. Dondequiera que estés y sin importar el clima lleva siempre tu propio sol.

5. Nadie elige como morir, pero si puede elegir como vivir. Cada día es un nuevo comienzo en el camino a la felicidad y siempre habrá problemas que te persigan, toma todo el tiempo que necesites para reflexionar y discernir, pero actúa lo más rápido posible para resolverlos. No se trata de encontrarte a ti mismo sino de construirte a ti mismo.

6. Aprende también de los errores ajenos porque no tendrás una vida tan larga para cometerlos todos. Aquello que haces por ti se desvanece cuando mueres, pero lo que haces por los demás conformará tu legado.

7. Procura ser feliz con lo que tienes mientras llega lo que tanto anhelas. Cuando sientas que todos los días te resulten iguales será porque has dejado de percibir las cosas buenas.

8. Sé feliz no porque tus circunstancias lo ameriten, sino porque tú lo mereces. Tu valor no radica en tus éxitos ni en tus fracasos, vales simplemente porque existes.

Por último, hacer feliz a los que amas también te hará feliz. Te aseguro que la vida te tiene reservadas muchísimas y lindísimas sorpresas, solo vive un día a la vez, brilla con luz propia y por favor, no olvides sonreír.

Cinthia Clara Betanzos
Estudiante Licenciatura en Psicología